EL REGRESO

¿Se han marchado ya? .Sí. ¿Y sin avisar? Sin avisar. ¿Han dicho al menos dónde iban? Únicamente me han dicho que estarán en la barca. Que te lo dijera así, que tú entenderías el mensaje. Gracias, hasta luego. La barca… ¡la barca! Santiago salió corriendo y se dirigió a una cala cercana a su casa. Allí estaban, dos hombres calados hasta los huesos a causa de la lluvia torrencial. Junto a la barca en que durante dos años él salió a buscar a su hija, que había desaparecido en el mar y a la que se daba por… ¡Hija mía! La niña se acercó. Los hombres se marcharon. Las lágrimas se fundieron con la lluvia. La vida empezaba de nuevo. PAZ LLAMAS