La carta

Sobre la pequeña mesa ubicada junto a su cama dejo la carta anónima que lo cambiaba todo. Solo un escueto mensaje contenía cuyas letras la herían como puñales. "Su marido la engaña" decía. Se dio la vuelta para observarlo aun dormido a su lado en la cama y dio rienda suelta a su imaginación planeando mil formas de cometer el asesinato perfecto pero por desgracia la paciencia nunca fue una de sus virtudes. Con cuidado de no despertarlo metió la mano en el cajón de la mesita y acaricio el frío metal. Entonces saco la pistola que habría de terminar con la vida de los dos. Días más tarde la policía logró arrestar al perturbado que había sembrado de cartas anónimas la ciudad. Gonzalbo