Silencio. Sólo el sonido de mi respiración. Al fondo de la cueva, unas sombras avanzan. Más allá, la luna me mira con pena. Sabe que voy a morir…
Ya están aquí. Me hago el dormido y agarro el puñal con fuerza… Entre ellos y yo, sólo la piel de oso… Tengo frío… Abro los ojos. Se detienen un instante. Están asustados. Como yo. Hambrientos. Como yo… Tristes. Como yo.
Al fin y al cabo, soy su hermano.
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